HOMBRES COMO NOSOTROS

FAMILIA PASTORAL

07 mar. 2009

— ¿Por qué hacéis esto? Nosotros también somos hombres semejantes a vosotros, que os anunciamos que de estas vanidades os convirtáis al Dios vivo, que hizo el cielo y la tierra, el mar y todo lo que en ellos hay. Hechos 14:15

Este fue el reclamo que hicieron Pablo y Bernabe cuando les querían ofrecer sacrificios como a los dioses. Sabiendo ellos que hay un Dios vivo, que es perfecto y santo, no se atrevieron a desafiarle, y mucho mejor aún, no se atrevieron a ofenderlo recibiendo tal adoraciòn.

Dios no tiene comparación, ¿cómo pretender robarle la gloria? ¡Solo el merece adoración y alabanza!.

A pesar, que el mismo Pablo se opuso a tal adoración, en el presente, hay personas que aún le ofrecen culto y no solo a él, si no a muchas personas e incluso animales u objetos o figuras que le representan; se arrodillan ante ellos, le cantan, les hacen peticiones como si ellos fuesen dioses o tuviesen el poder de Dios.
Como esta escrito en la Biblia: “… ya que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos. Amén. Romanos 1:25

Dios dejo establecido en los 10 mandamientos que nos alejásemos de tal practica:
3»No tendrás dioses ajenos delante de mí.
4»No te harás imagen ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. No te inclinarás a ellas ni las honrarás, porque yo soy Jehová, tu Dios, fuerte, celoso, … Éxodo 20:3-4

Esta muy claro el querer de Dios, Èl no quiere que nos hagamos imagen de Él para adorarle. Dios, Jesús, están en los cielos y no debemos hacernos imágenes de ellos para adorarles y mucho mas se disgusta Dios cuando adoramos personas u objetos.

Tampoco debemos pedirle a los santos, apóstoles, Maria madre de Jesùs, u otro ser para que interceda por nosotros puesto que: “hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres: Jesucristo hombre, el cual se dio a sí mismo en rescate por todos, de lo cual se dio testimonio a su debido tiempo.” 2Timoteo 2:5-6

Acerquémonos pues a Dios en espíritu y en verdad por medio del Salvador Jesucristo.

Emigdio Sumosa P.

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